Comedor “El Gaby” comenzó a funcionar un martes 20 de noviembre de 2001 en B° Sierras y Parque de Jesús María. Por aquel entonces 24 chicos y chicas fueron los primeros en recibir una comida elaborada por Sergio y Alicia, quienes mantienen el comedor. A la semana de abierto, 97 chicos asistían por su ración diaria llegando a 205 en 2003 cuando alcanzó su pico máximo.

Hoy en día cuentan con 170 niñes y una delicada situación para seguir sumando raciones. Sergio Luna, referente del espacio, cuenta a La Ronda que hubo un importante incremento en la demanda en estos últimos meses. En ese sentido, asegura que no pueden seguir sumando más gente al comedor porque “no dan los números”. 

“Ha pasado, con esto que los chicos que estaban de vacaciones en el colegio, los chicos no comen al medio día, nosotros le damos a la noche por que al medio día comen en el paicor”, señaló Sergio y manifestó que a veces reducen la cantidad por ración para darle a nuevos chicos y chicas. 

Actualmente el problema radica en que no podrán seguir contando con uno de los aportes más importantes del comedor, que lo hacia GUMA desde sus comienzos, ya que desde la empresa caroyense le comunicaron a Sergio que por la situación económica este mes ya no podrían seguir aportando los 12 mil pesos en mercadería. 

Según Sergio, cuentan con provisiones para dos meses y se esperanza que en ese tiempo puedan solucionar la problemática para no cerrar el comedor. Para ello remarca que es muy importante la ayuda de la gente para “poder seguir haciéndolo”.

La Municipalidad de Jesús María, por su parte, aporta el pago de gas para la cocina, y este mes se comprometió a sumar $5000 en mercadería. 

Para colaborar, se necesita arroz, fideos, azúcar, aceite, puré de tomate, yerba, leche, y productos no perecederos que puedan colaborar a los platos de comida. Para llevarlos directamente al merendero, pueden hacerlo en la calle Sierra de la Masa al 858, pegado al polideportivo municipal. 

También aceptan donaciones de ropa ya que durante todo el año mantienen un ropero comunitario.