Hace 15 días se dio el puntapié inicial para poner en marcha la Ley Micaela en la ciudad, siendo el primer municipio del país en implementarla. Con un Bochas Sport Club lleno, la uruguaya Gabriela Romanutti brindó una charla a todo el personal municipal y al cuerpo legislativo, en el marco de la presentación de la ley y su primera capacitación. 

El equipo está coordinado por Florencia Strasorier que remarcó el carácter "intenso" que significan desde el punto de vista organizativo estas capacitaciones, ya que implican compartir instancias con más de 400 personas, dividirlas en grupos y que ninguna quede sin ser avisada. 

Los jueves cada 15 días, hasta el mes de octubre, se darán las capacitaciones de las cuales son de carácter obligatorio al menos dos participaciones para quienes sean parte del municipio. "Queremos instalar en la cabeza de las personas que trabajan allí, que jueves de por medio hasta final de este año van a estar las capacitaciones, entonces si no pudiste ir a la primera vas a la próxima", aseveró. 

¿Cómo son las capacitaciones?

En las que tienen como eje la perspectiva de género se abordan temas como la división sexual del trabajo, roles y estereotipos de géneros. La dinámica es trabajar con mito/realidad mediante la cual "afloran" las nociones encarnadas en nosotres. "Lo que siempre decimos es, no se pongan mal porque todas las personas nacimos machistas, es develar el camino de sociabilización, de enseñanza que nos hizo a todos machistas". En tanto, la segunda instancia gira en base a los "micromachismos", actos que perpetúan el machismo a gran escala pero que están mayormente legitimados por la sociedad. 

Florencia es Licenciada en Comunicación Social, y comprende la importancia que tiene el lenguaje a la hora de entablar relaciones con un grupo: "Tengo que revisar de no utilizar palabras que hagan perder la atención a las personas por que yo dije algo", aseguró, remarcando que en los tiempos que corren, la posverdad "nos hace enfrentar en vano". En ese sentido, contó que busca trabajar con el costado "humano y cotidiano" para generar empatía y buscar los puntos en común: "La unanimidad que tomo la Ley Micaela en el Congreso de la Nación y en el Concejo Deliberante, me sugiere hablar desde la unanimidad entre nosotros y nosotras. Estamos de acuerdo que es necesario poner en marcha lo necesario para disminuir la violencia de género". 

En la segunda capacitación fue el turno del gabinete municipal, cuerpo legislativo y tribunos de cuentas y en los primeros balances, Strasorier comentó que se "notó una necesidad de un espacio de charla y reflexión". Así mismo comentó que eso implicó un cambio en la dinámica ya que "se redujo al mínimo la proyección de contenido" y se destinó más tiempo a la "charla, al debate, a la anécdota", situación que celebró porque esa es "la linea científica en los estudios de género".

Con respecto a las resistencias que pueden encontrar por parte de las personas y a la confusión recurrente entre "una teoría de género" e ideología, Strasorier insistió en que se reducen las nociones técnicas para "dar lugar a las vivencias y creencias de cada uno". 

"Veo una apertura a escuchar, pero el laburo que implica que te escuchen, hay que ser cuidados todo el tiempo (...) me encanta ver como entre ellos y ellas mismas se escuchan, se hacen devoluciones" continuó.