El Tercer Malón de la Paz, es la marcha que están llevando adelante desde el martes, cuando salieron desde Jujuy unas 120 personas de las comunidades originarias de nuestro país. En el camino se han sumado más participantes y hoy la marcha es de unas 200 personas. En este momento se encuentran en San Miguel de Tucumán haciendo paradas en diferentes tramos, y una de las comitivas está en Catamarca.  

El recorrido

Tuvo su punto de partida en La Quiaca, Jujuy. Pasará por ciudades y localidades de Salta, Tucumán, Santiago del Estero, Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires para llegar finalmente a la Ciudad de Buenos Aires el martes 1 de agosto, el Día de la Pachamama.

La marcha recorrerá tramos a pie y otros en micro para cubrir 1.875 kilómetros. En el camino van encontrándose con otras comunidades y organizaciones, para compartir la palabra y la fuerza que finalmente les hará llegar a Buenos Aires a acampar en busca de respuestas, sin fecha de retorno.  

El Primer Malón de la Paz se gestó en 1946, durante el primer gobierno de Juan Domingo Perón, cuando los pueblos originarios viajaron a la Ciudad de Buenos Aires por la restitución de sus territorios. En 2006, se realizó el segundo, en rechazo a la presentación de un recurso de inconstitucionalidad por parte del gobierno de Jujuy contra el fallo judicial que reconoció sus derechos sobre las tierras que ocupan.

En 2023, El Tercer Malón de la Paz tiene dos destinos con demandas específicas: 

El primero, La Corte Suprema de Justicia a la que le exigirán que se expida respecto de la inconstitucionalidad de la reforma “exprés” perpetrada por Gerardo Morales, gobernador jujeño con aspiraciones vicepresidenciales.

Y el segundo, el Congreso de la Nación al que le solicitarán la intervención a la provincia de Jujuy y la elaboración y sanción de la Ley de Propiedad Comunitaria.

Sobre esta movilización histórica, conversamos con Germán David de la Comunidad Guaraní Cerro Colorado, una de las tantas comunidades movilizadas en este Tercer Malón de la Paz.

“El acompañamiento y el apoyo que recibimos en todos estos días de marcha es impresionante, todos los hermanos de las diferentes provincias y organizaciones que siempre nos acompañan, requieren que aunque sea nos paremos un minutito para hablar y dar un mensaje a los hermanos que están esperándonos, nunca nos hemos sentido solos” comentó Germán.

“Más allá que la lucha hoy sea en la provincia de Jujuy, corre riesgo que sea nacionalizado” y profundiza en que el mayor riesgo es “que el día de mañana nuestras nuevas generaciones no tengan sus derechos, no tengan agua para beber, que es un peligro latente en todo el mundo, como la contaminación ambiental y el derecho a nuestras tierras, nos va a afectar a todos”.

La lucha es por la vida, afirma Germán: “todo lo que tiene que ver con la vida que los pueblos indígenas siempre hemos mantenido, una vida, una producción sustentable, hoy se ve totalmente deteriorado con el avance de la minería, la contaminación ambiental, la deforestación que avanza, el monocultivo que afecta mucho a los territorios”. 

Sobre la reforma de la constitución provincial de Jujuy, manifestó que es “dar la carta blanca para que todo lo negativo avance”. Y en lo que se refiere a los pueblos originarios, sostiene que “siempre hemos reclamado que no se hizo la consulta que nosotros por ley tenemos derecho constitucional, a los pueblos indígenas nunca se le hizo la consulta, para que nosotros en nuestros derechos podamos poner sobre la mesa que es lo que queremos en nuestros territorios”.

Sobre la propiedad comunitaria explicó: “lo venimos pidiendo desde 2010 cuando hicimos un pacto entre los pueblos indígenas y el gobierno nacional, pero nunca se avanzó, hemos presentado un proyecto pero nunca se trató, quedó atascado en una comisión del congreso y de ahí no avanza”.