En comunicación con La Ronda, Silvia Valverde, secretaria general SADOP-JUJUY e integrante del triunvirato de CGT Jujuy, detalló la situación que viven los y las docentes en la provincia, quienes tienen el salario más bajo del país.
Silvia Valverde, secretaria general SADOP-JUJUY, e integrante del triunvirato de CGT Jujuy
Desde el mes de marzo la docencia jujeña comenzó a reclamar por sus salarios, los más bajos del país. Inspirados por el levantamiento de los docentes salteños avizoraron que su situación era todavía más crítica. En esta provincia, los y las trabajadoras de la educación que recién comenzaban, contaban con un salario básico de 35 mil pesos, cuando la Canasta Básica Familiar es de $203.361.
Ante la falta de acuerdo salarial empezaron las protestas en las calles, a las que en las últimas tres semanas se sumaron otros gremios con sus demandas. A este contexto se le suma que el gobernador Morales comenzó el proceso de reforma constitucional, que derivó en una profunda crisis institucional en todo Jujuy. Recordemos, el gobierno terminó con una reforma exprés firmada y jurada a espaldas del pueblo, el estallido del jujeñazo, la represión.
El jueves pasado el gobierno convocó a la última reunión paritaria. El Centro de Docentes de Enseñanza Media y Superior (Cedems) y el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop), aceptaron el acuerdo y retomaron el dictado de clases este lunes. Destacando que se volverán a discutir las paritarias en el mes de julio. Por su parte, la Asociación de Educadores Provinciales (Adep), que representa a los docentes de los niveles inicial y primario, determinó rechazar la propuesta del Gobierno y sostener el paro por tiempo indeterminado.
En comunicación con La Ronda, Silvia Valverde, secretaria general SADOP-JUJUY, e integrante del triunvirato de CGT Jujuy, comentó que “el gobierno hizo un último ofrecimiento el día 9 de junio, en donde cerraba la negociación si no aceptaban los sindicatos docentes.”
Desde el triunvirato de CGT Jujuy, funcionaron de intermediarios ya que entiendan que “si el gobierno cerraba la negociación, esto no terminaba más”. Valverde explicó que la intención fue “abrir un nuevo canal de diálogo” y que finalmente el gobierno “convocó a las paritarias la semana pasada, en donde fueron convocados formalmente.”
Resaltó que durante estos 8 años del gobierno de Morales “tuvimos muchas idas y venidas, en donde no convocaba siempre a nuestro sector”. Explicó Silvia que en esta oportunidad desde el gobierno “se hizo un ofrecimiento a toda la docencia jujeña” y cada sindicato a través de las distintas modalidades decidió. “Nosotros en particular tuvimos reunión de delegados el día viernes en donde se decidió retomar las clases y aceptar la propuesta del gobierno, teniendo en cuenta que dentro del acta paritaria se convoca a una nueva reunión paritaria el día 13 de julio”.
“Acordamos para dar un respiro, acordamos que este aumento se vea reflejado en el salario de junio, el no descuento de los días de paro, que nos parecía muy importante en respuesta a los compañeros y compañeras que especialmente el sector privado tuvo una gran adhesión”.
Recalcó que les “pareció fundamental poder, no dar un corte a la negociación pero sí aceptar la propuesta, en donde también se solucionaron cuestiones de nuestro sector” y aseguró que no consideran que “sea la propuesta ideal, pero sí un gran avance a lo que veníamos acostumbrados.”
La inspiración fue Salta.
“En salta se produjo un gran movimiento”, mencionó Silvia y agregó que “todo ese reclamo comenzó como un apoyo a los compañeros de Salta, y nos dimos en cuenta en ese momento que estábamos peor que los compañeros de Salta”.
“Había una gran desmovilización en la provincia de Jujuy, porque había políticas de estado que cercenaban derechos” explicó. “Por ejemplo, la primera medida que este gobierno ofreció hace 8 años, fue un presentismo como parte de nuestro salario, entonces sobre que los docentes cobramos poco, si faltábamos se producía un gran vacío dentro de nuestro sueldo”.
Al condicionamiento estrictamente económico se sumaron “distintas situaciones, como la criminalización de la protesta, donde se le hacían contravenciones a los sindicatos que marchabamos o que nos apostamos frente del ministerio para hacer un reclamo”.
Aseguró que “Jujuy es una provincia que se caracterizó siempre por movilizar” y “estuvo por mucho tiempo cerrada a esa situación, gracias a los compañeros salteños pudimos ver… y los docentes dijimos basta”.
La docencia “es el sector que empezó con los reclamos y después se fueron uniendo la salud, los empleados municipales, todo el sector de los trabajadores de la provincia, perdimos el miedo de salir a la calle, perdimos el miedo al reclamo y desembocamos en esta situación, que si bien no es la ideal hizo que el gobierno se siente con los trabajadores, que entregue un acta en una paritaria (...) que en Jujuy durante 8 años no se entregaron actas de las conversaciones paritarias, hubo mucho de cercenar derechos que estamos recuperando con un gran movimiento en estos días” sentenció.
El jujeñazo continúa
“Nosotros como docentes tenemos una lucha que va más allá de las demandas de nuestro sector, es una lucha como ciudadanos de nuestra provincia, de revisar lo que se firmó en nuestra constitución, una constitución totalmente inconsulta y que llevó a que toda la ciudadanía, los pueblos originarios, reclamemos ante esto.”
Aseguró además que “la sociedad jujeña está muy golpeada, muy dolida” y que el jujeñazo “es una lucha de todos los jujeños y que vamos a seguir llevándola adelante”. Además, agradeció a sindicatos y docentes por movilizar y visibilizar la situación de Jujuy, así como también a todos los medios que replicaron lo que sucedía en la provincia.