Pasaron dos años de la muerte de Lautaro Guzmán y Agustín Barrios, tras una persecución policial que aún no está esclarecida, que derivó en un accidente de tránsito.

“Comenzamos un camino de lucha para llegar a la verdad y hoy a dos años el policía está imputado por homicidio culposo”, dijo Rosa Guzmán, hermana de Lautaro en La Ronda. 

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“Cuando uno lo vive desde afuera piensa que nunca le va a pasar, y cuando te toca quedas ahí solo. Luego del caso de los chicos pasó lo de Blas Correa y Joaquín Paredes y todas las familias nos juntamos y comenzamos con esta lucha por la justicia, por la verdad y para que se acabe la violencia institucional”, señaló Rosa y agradeció a las madres de Blas y Joaquín por la visibilidad que aportaron del caso sucedido en Colonia Caroya. 

 “Entre todos nos apoyamos y nos consultamos y sobre todo nos damos fuerzas. De eso se trata, de acompañarnos”, agregó. 

A su vez, describió como “agotador” y “cansador” el proceso judicial ya que van todos los meses a tribunales a hablar con el fiscal y nunca hay novedades. “Es persistir y no bajar los brazos”, manifestó. 

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Este domingo 26 de junio, en las intersección de La Pampa y Tierra de Fuego, en barrio La Florida de Jesús María, familiares de Agustín y Lautaro convocan a la comunidad a participar de un encuentro para concientizar acerca de la violencia institucional y los abusos policiales. 

Será a partir de las 15 horas y contará con la presencia de familiares de víctimas de gatillo fácil de la provincia, entre ellas Soledad Laciar madre de Blas Correa y Soledad Paredes, madre de Joaquín y referentes de Derechos Humanos. 

“Decidimos hacer esto porque nuestro pedido de justicia está encaminado pero creemos que justicia es para que no le pase a ningún chico más”, explicó Rosa. 

Será una instancia para saber cómo proceder ante casos de abuso policial. 

“Quizás mi Lautaro sabía como proceder hubiera frenado pero los chicos tienen miedo a la policía por que los llevan por adelante o los golpean”, cerró.